¡No piquen en el anzuelo del phishing!

Seguramente hayan recibido en alguna ocasión algún mail de gente como Gregorio Powell, Marty Espinosa, Krista Dixon o Young Curran, ofreciéndoles todo tipo de productos destacando entre todos ellos la inefable Viagra. Sepan que existe una solución más sencilla para la disfunción eréctil: el agua de Bezoya, perfecta para cumplir con su señora.

Pero el motivo de este post no versa sobre el SPAM, en una entrada anterior ya les expliqué como soportar esa lacra con cierta dignidad. En esta ocasión les voy a hablar del Phishing, una táctica que mucho listo, que hay por ahí suelto, utiliza para quedarse con sus datos bancarios. Funciona de la siguiente manera:

• Usted recibe un mail de lo que parece ser su banco o caja donde le piden que introduzca sus datos de registro en un formulario de una página que es igual que la de su banco o caja porque debido a un problema, llamémosle X, esos datos se han perdido.
  

• Usted, todo confiado, así lo hace.

• A partir de ese momento, en algun lugar del mundo, alguien agarra el ratón y el teclado y comienza a hacer uso de los fondos que usted tenia pensado destinar a la compra en el super.

Para evitar que le dejen la caja más vacia que el cerebro de un político lo mejor será que siga los siguientes consejos:

• NO HAGA CASO si el banco le pide sus datos en un email. Su banco le tiene fichao y bien fichao así que no perderá sus datos así como así.

• NUNCA acceda a los enlaces de esos mails. Si tiene que ir a la web de su banco hágalo escribiendo la dirección que usted ya conoce directamente en el navegador, así evitará que se le cuele bichos raros en su máquina (spyware, viruses,...), sobretodo si es usted usuario de Explorer ¿le he dicho ya que use Firefox?

• ¡SENTIDO COMÚN! ¿Usted cree que una entidad bancaria seria le escribiría un mail con frases como "teniendo technical problemas", "cuenta bancaria de ustes, datos necesitamos"?

En fin que esto del phishing no es nada nuevo, pero siguen cayendo muchos incautos en las zarpas de esta gentuza ¡A pico y pala los ponia yo cojones!